Una década prodigiosa

Se va 2009, y con él enfilamos el final de toda una década maravillosa para el fútbol sevillano que siente, goza y disfruta en blanquirrojo.

Atrás queda para la posteridad, para los libros de historia del fútbol en Sevilla, para los anales del Sevilla Fútbol Club, unos años maravillosos que comenzaron con la majestuosa celebración de nuestro primer siglo de existencia, el Centenario más hermoso que ha visto el fútbol en España y que nuestro corazón sevillista corea al ritmo del himno que compuso Javier Labandón; el sevillismo hecho en música.

Recuerdo con emoción aquella frase premonitoria de mi amigo Luismi, una tarde noche en los alrededores de la bombonera de Nervión pocos meses antes de ese 14 de Octubre de 2005.

¡ Ésta es nuestra década Antonio ¡

Y a los dos nos brillaban las pupilas soñando despierto el momento en el que nuestro querido Sevilla Fútbol Club, llegase algún día, siquiera, a jugar una final de la Copa de España.

Y Luismi acertó. Vaya si acertó. Estos últimos años han sido, están siendo, la época más brillante del club en todos los aspectos y en el deportivo, con la conquista de cinco títulos en seis finales disputadas, casi irrepetible.

Antes de toda esta demostración de grandeza, de todo esta borrachera de alegría sevillista, a los sevillistas de mi generación se les conocía como la generación frustrada del sevillismo. Aquella que suspiraba por ese pasado esplendoroso que nos contaban nuestros padres y abuelos en la España de blanco y negro; aquella que añoraba tiempos pasados por ser mejores, aquella generación en definitiva que desde su infancia en Gol Norte sólo había visto frustración, mediocridad, y en la mayoría de las ocasiones, fracasos deportivos e inestabilidad institucional.

Hoy, cuando termine 2009, todos los sevillistas que hemos tenido la inmensa fortuna de tocar el cielo con nuestras manos, que hemos mirado al tercer anillo con orgullo, que hemos disfrutado y compartido la pasión sevillista hasta lo indecible, se nos recordará, por los tiempos de los tiempos, como los sevillistas de la generación de Eindhoven.

Porqué allí, en esa pequeña y coqueta ciudad holandesa le dimos la vuelta a la historia. Aquella tarde-noche del 10 de mayo de 2006, Eindhoven fue testigo de cómo una incontenible fuerza sevillista rompía con el pasado y escribía la que hasta ahora es la página más brillante del fútbol en Andalucía, conquistando el Sevilla Fútbol Club, primer titulo europeo de su historia. Luego vendrían otros cuatro títulos más y sobre todo, se hizo realidad esa frase pronunciada en 1905 por nuestro primer Presidente, José Luis Gallego....”la admiración de los demás será nuestro premio...”

Feliz año nuevo sevillistas y que 2010 sea el broche de oro a toda una década prodigiosa del Sevilla Fútbol Club.....porqué lo mejor, sin duda, está por llegar.