lunes, 27 de abril de 2009

Desinflamos el colchón


Hoy no quiero hablar de fútbol, ni de las cuatro derrotas consecutivas en la liga, ni de los once puntos despilfarrados en cuatro semanas

Hoy no quiero hablar de cómo hemos perdido nuestro séptimo partido en Nervión.

Hoy no quiero hablar de lo que duele perder en tu casa contra el Madrid, o contra el Málaga, o contra el eterno rival.

Hoy no quiero hablar del árbitro, ni de como es posible dilapadar once puntos de diferencia entre el tercer y el cuarto clasificado.

Hoy no quiero hablar de lo doloroso que resulta que el peor Madrid de los últimos tiempos te pase por encima, ni de por que das la sensación que el equipo está cascado físicamente.

Hoy no quiero hablar de como es posible que un futbolista en el ocaso de su carrera, como Raúl, te haga el sólo tres goles.

Hoy no quiero hablar de Bernardino González, ni de Pérez Lasa, ni de Mejuto, ni de Pérez Burrull.

Hoy no quiero hablar de la mala suerte, o de la manía de echarle siempre la culpa a la diosa fortuna.

Hoy no quiero hablar de porqué el delantero centro de la selección brasileña lleva tres partidos seguidos en el banquillo, o de porqué hay que jugar permanentemente con las bandas cambiadas

Hoy no quiero hablar de porqué hay que prescindir, por sistema, de las mejores futbolistas que juegan por las bandas en España, o de porqué no somos capaces de ponerle un balón de gol a Kanouté en todo el partido.

Hoy no quiero hablar de porqué siempre damos un paso atrás cada vez que nos adelantamos en el marcador, o de porqué nunca somos capaces de controlar el medio campo, o de porqué nos empeñamos en dar cada dos por tres voleones sin ton ni son.

Hoy no quiero hablar de porqué tanto miedo a perder, y porqué tanto pánico a ganar

Hoy no quiero hablar de partidos bochornosos, de derrotas estrepitosas, de partidos desquiciados, de futbolistas desfondados, de una afición disgustada.

Hoy no quiero hablar de sistemas equivocados, de futbolistas descentrados, de equipo desmotivado.

Hoy no quiero hablar de planteamientos rácanos, de vulgaridad en las formas del equipo, ni de actitudes conformistas.

Hoy no quiero hablar de cómo podemos perder, por méritos propios, nuestro objetivo, de cómo hemos dado vida a nuestros rivales, de cómo hemos alimentado entre nuestros fieles seguidores, la desconfianza, el miedo y la inseguridad.

Hoy no quiero hablar de perder la tercera plaza, ni de la posibilidad de que ni siquiera juguemos el año próximo en Europa.

Hoy no quiero hablar del fracaso deportivo que supondría no jugar la Liga de Campeones.

Hoy no quiero hablar de cómo hemos soportado la humillación de ser derrotados por el entrenador más ruín, más pérfido y más inhumano que hemos tenido en nuestra historia.

Hoy no quiero hablar de cómo ese mismo entrenador nos ha dado, otra vez, una lección de cómo ganar partidos desde el banquillo.

Hoy no quiero hablar de que no es casualidad ver como un equipo pierde cuatro partidos consecutivos.

Hoy no quiero hablar de Manolo Jiménez, nuestro entrenador. ¿Para que hablar? si ya hoy la grada de Nervión ha dictado sentencia

Hoy quiero hablar de la enésima final que jugamos en Villareal el próximo sábado.

Hoy quiero hablar de que quedan quince puntos por disputar, y de que ganándolos todos estaremos en la Champions.

Hoy quiero hablar de que dependemos de nosotros mismos para mantener esa tercera plaza.
Hoy quiero hablar de que tenemos una afición inimatable, fiel, generosa, incondicional, sabia, honorable, soberana, entendida, sufridora, orgullosa de su historia, presumida, alegre y señorial, inteligente y paciente, y sobre todo, inteligente.
Hoy quiero hablar de lo que nos une, más de lo que nos separa, de lo que amamos, más de lo que despreciamos, de lo que sentimos, más de lo que perdimos.
Hoy quiero hablar de mi equipo, de tu equipo, de nuestro equipo. Del equipo de mi padre, y del tuyo. Del Sevilla Fútbol Club, el equipo más grande del Sur de Europa.

sábado, 25 de abril de 2009

Ganar para joder


Ganar para joder a los que quieren ver el fracaso de un proyecto deportivo llamado Sevilla fútbol Club y que lidera José María del Nido Benavente
Ganar para joder a los manipuladores de la comunicación, a los vendedores de humo verde, a los que desparraman su odio antisevillista tras un micrófono o una pluma.
Ganar para joder a la mafia arbitral en España, a los árbitros rateros, a los que mangan ligas en Mallorca o ensucian la noble y difícil profesión de árbitro de fútbol.
Ganar para joder a Bernardino González Vázquez, el ladrón de Valencia, a Iturralde González, el ladrón de Mallorca, (otra vez nos lo han puesto en el partido de Villareal), a Pérez Lasa, el ladrón de Pamplona.
Ganar para joder la liga al Real Madrid, el equipo que lleva mas de cien años robando títulos en España.
Ganar para joder a los cronistas de la Villa y Corte (Roberto Gómez y compañía) vendeburras baratas que escriben siempre con el estomago agradecido.
Ganar para joder a los hipócritas que presumen de fair play en público y luego bajan a los vestuarios amenazando al árbitro.
Ganar para joder a los que sancionan una agresión con distinto rasero.
Ganar para joder a los que cambian su honor por un puñado de libras.
Ganar para joder a los peseteros, a los desleales, a los falsos, a los pérfidos, a los arteros, a los embusteros, a los mentirosos, a los impostores, a los infieles, a los infames, a los judas, a los indecentes. A LOS TRAIDORES
Ganar para defender nuestro honor, nuestro orgullo, nuestra dignidad, nuestro sentimiento, nuestra pasión, nuestros colores, nuestro escudo, nuestra bandera, nuestra afición, nuestro tercer puesto, nuestro entrenador, nuestra honorabilidad, nuestro prestigio, nuestro tercer anillo, nuestro sentimiento, nuestro sevillismo.
Es el día de la afición y lo vamos a demostrar.

jueves, 23 de abril de 2009

Mucho Barça para tan poco Sevilla

Tercera derrota consecutiva de nuestro equipo y lamentable la imagen ofrecida en el terreno de juego. Hacía tiempo que los sevillistas no veíamos a nuestro equipo en el Nou Camp con una inferioridad tan manifiesta. De hecho el partido ha sido un calco casi, del revés sufrido en San Mamés en la Copa del Rey.
Un gol a los dos minutos y ahí se acabó el partido.
No se si el mensaje de dar minutos a futbolistas poco habituales en la alineación titular como Koné y Maresca, o cambiar las bandas para que Navas ocupe su tiempo en tapar las subidas de Alvés antes que utilizarlo como baza ofensiva por su extremo, o dejar en el banquillo a Kanouté, han confundido al equipo.
Pero a los sevillistas si nos ha confundido. Cuando el equipo saltó al césped del Nou Camp ya sabíamos que el Valencia se había colocados a dos puntos de diferencia. ¿Lo sabía el entrenador?
Está claro que sin la intensidad, sin la concentración, sin la aptitud colectiva de un equipo que hasta ahora es el tercer clasificado de la liga, el Barcelona te hace un siete antes de que empieces a calentar.
Que el Barcelona te golee entra dentro de lo previsible. Pero el Sevilla no puede dar esa imagen de equipo dócil, sumiso, conformista, débil mentalmente que hemos dado durante todo el partido pero fundamentalmente en el primer tiempo.
No nos gusta ver a nuestro Sevilla, asumiendo el rol de equipo mediocre que sale asustado en casa del líder.
No nos gusta ver a nuestro Sevilla, vagando como alma en pana en el césped, corriendo como pollos sin cabeza en busca del balón, sin intensidad defensiva, sin presencia en el medio del campo, sin llegar a la portería contraria.
Desaparecido en combate, en definitiva.
España entera ha visto una caricatura de equipo que nunca ha dado la sensación de ser el tercer clasificado de la liga española.
La clave de este bochornoso espectáculo ha sido, sin duda alguna que todos: entrenador, futbolistas, dirigentes del club incluso, han están más pendientes del partido contra el Real Madrid que del de esta noche en Barcelona. Y los puntos valen lo mismo que contra el Getafe, contra el Barcelona o contra el Madrid.
Sería lamentable echar por la borda el magnifico trabajo de toda una temporada en este último tramo final del campeonato. Y el objetivo deportivo de la entidad corre ahora serio peligro.

martes, 21 de abril de 2009

Nou Camp: Segunda etapa pirenaica



Sin tiempo para lamernos las heridas dejadas por el ladrón de Bernardino, el equipo se va a Barcelona donde le espera el que con casi toda probabilidad, y con todo merecimiento, será el Campeón de Liga de la temporada 2008-2009 en la liga española.
Nadie es ajeno a la dificultad que supone puntuar en el Nou Camp. Pero en fútbol no hay nunca un partido igual que otro, ni nadie es invencible.
Para ganar en Barcelona se necesitan tres cosas ineludiblemente: tener un buen equipo, tener ambición y tener la suerte de cara en momentos puntuales del juego.
Nos espera un FC Barcelona que ha empezado la cuenta atrás para cantar el alirón. Nos espera un equipo formidable, un equipo que está rompiendo moldes y batiendo records históricos en la liga.
Pero el Sevilla, lo dijo ayer nuestro presidente, no va a Barcelona de turismo. La batalla que se pierde siempre es la que no se da. Y hay mucho en juego como para despreciar los tres puntos que le vamos a disputar al líder de la liga.
Todavía no hay lista de convocados, entre otras cosas, porque el club ha anunciado que alegará ante el comité de competición, algunas de las tarjetas amarillas mostradas con mala fe por el ladrón de Bernardino, entre ellas las de Palop y la de Adriano. Pero jueguen los que jueguen, este equipo dará la cara en el Nou Camp, como la dio en Mestalla, hasta que un mal árbitro de fútbol se la partió.

domingo, 19 de abril de 2009

Bernardino González Vázquez es un ladrón


No se que va a pasar en los segundos cuarenta y cinco minutos. No se si perderemos, ganaremos, nos golearan o acabaremos con siete. Pero me da igual. Pase lo que pase, no voy a cambiar el titular de este post.

Bernardido González Vázquez es un ladrón que se dedica a meter la mano en la cartera a mi equipo del alma cada vez que se viste de árbitro.

Con sólo cinco o seis faltas normales en el primer tiempo, sin dar una patada, ni una entrada alevosa, ni un amago de violencia, nos saca cuatro tarjetas amarillas poniéndonos cadenas en los tobillos a cuatro futbolistas coloraos que han provocado, además de la absolutamente injusta y desproporcionada expulsión de Adriano, que el Valencia empatara en la jugada siguiente inventándose un penalty inexistente. Escudé no toca al delantero valencianista.

En una jugada que pita bote neutral, ¡Bote neutral! Acabamos con dos tarjetas.

A Renato le han abierto la ceja en sus hocicos – si en sus hocicos- y ha mirado para otro lado el ladrón.

A Renato por poco le parte el tobillo Baraja, también delante de sus hocicos, - si sus hocicos – y el ladrón ha vuelto a mirar para otro lado

Lo peor de todo es que desde que lo nombraron sabíamos que iba a pasar lo que está pasando. Y lo que probablemente pasará en el segundo tiempo.

Quien lo pone, sabe que el ladrón de Bernardino le gusta meter la mano en la cartera al Sevilla Futbol Club. Veremos a ver si en Mestalla, además de perder el partido, no perderemos a varios jugadores para unos pocos de partido. Confirmado ni Andrés Palop, ni Adriano
2ª PARTE Y MÁS DE LO MISMO: EL LADRÓN SIGUIÓ ROBANDO
Le perdonó a los diez minutos la tarjeta roja a Mata cuando hizo por detrás y sin intención de jujar el balón una entrada a Mosquera derribándolo cuando salíamos a la contra.
Le perdonó la segunda amarilla y por tanto la expulsión a Barajas, en una entrada sobre Romaric, cuando otra vez armábamos el contraataque.
Pita otro penalty que no fue, y que en cualquier caso vino precedido por un clarísimo empujón de Silva a Fernando Navarro. Nos apuntilló.
Tan cierto es que el ladrón roba, que no tiene cojones para expulsar a Escudé en la falta del primer penalty. Escudé ya tenía una tarjeta amarilla y era la segunda.
Se tragó el ladrón otra vez los cojones cuando nos lo tuvo para expulsar a Fernando Navarro en la jugada del segundo penalty. El bravo defensa sevillista ya tenía otra tarjeta amarilla.
Otra vez el ladrón, una vez consumado el robo a mano armada, no tuvo los reaños suficientes para expulsar a Luis Fabiano en la típica cruzadera de cables del carioca.
Pero eso sí, cumplió con la media de expulsiones cada vez que nos atraca. Ocho tarjetas amarillas, y dos expulsados en un partido que él solo se bastó para desquiciarnos. Como hace siempre. Y tuvo la desfachatez encima de sacarle la quinta amarilla a Palop, por motivos que sólo el sabe.
¡Que pena de fútbol español! ¿Nos pedirá perdón ahora Sánchez Arminio?
Y lo peor está por llegar. Otro ladrón del arbitraje nos pita contra el equipo que lleva más de cien años robando por España.
PD.- Y no me da la gana de hablar de nuestros errores, que los hemos tenido. Ante tamaña tropelía cometida sobre mi equipo eso es baladí. Y si alguién quiere hablar de excusas, allá él. Yo sólo se que mi equipo ha dado cara y se la han partido un energúmeno que deshonra la noble y difícil profesión del arbitraje.

sábado, 18 de abril de 2009

¿Jugadores mercenarios?


El Sevilla Fútbol Club, tercer clasificado de la liga española, visita mañana el campo del Valencia Club de Fútbol, el club que lleva noventa años intentado ser una mala copia del Real Madrid.

La sufrida, y a veces injusta, afición valencianista ha asistido atónita en los últimos años, a un sinfín de situaciones esperpénticas provocadas, básicamente, por la disparatada gestión de sus dirigentes, que tras el paréntesis que supuso en 1986 el descenso a 2ª División, no ha logrado dar equilibrio ni estabilidad a un equipo que incluso logró meterse por dos años consecutivos en la mismísima final de la Champions.

Tras perder esas dos finales, llegaron las destituciones de varios entrenadores de reconocido prestigio, la presión de una grada desquiciada que disparaba contra todo lo que se movía, los fichajes a base de talonarios, los remiendos y parches a una descompensada y envejecida plantilla a base de muchos millones en fichajes y en fichas, y la escandalosa gestión deportiva y societaria que han llevado al equipo de la rata pená, a una situación financiera, patrimonial y deportiva muy peligrosa.

Y en este maremagnun, un equipo hecho para estar arriba peleándole el titulo a los grandes de nuestra liga, llevaba seis partidos seguidos sin conocer la victoria, hasta que el 22 de marzo ganó en los Campos de Sport del Sardinero al Racing Club de Santander. Justo después de que se supo, que el club había conseguido dinero para pagar a sus futbolistas.

Y ahora que la cuenta bancaria de los jugadores ha quedado engrosada con algunos ceros de mas, ha llegado la mejor racha de la temporada del Valencia: 12 puntos en los ultimos cuatro partidos. ¿Casualidad?

El Valencia se juega la temporada en el partido de mañana contra el equipo más grande del sur de Europa: El Sevilla Fútbol Club. Los futbolistas del Valencia se juegan el seguir cobrando el año próximo. Algunos incluso es probable que tengan que ser malvendidos para aminorar la asfixiante deuda contable del club.

Llega a Mestalla la antítesis de lo que es el Valencia. Contra el despilfarro del club ché, una gestión económica modélica del equipo más grande del Sur de Europa. Contra la improvisación de los dirigentes valencianos, una planificación deportiva reconocida en toda Europa. Contra el galimatías accionarial que es en la actualidad el equipo levantino, un proyecto societario sólido y consolidado. Contra el déficit presupuestario y la enorme deuda del club valencianista, un club que convirtió su deuda en calderilla y que lleva cinco años consecutivos de beneficios económicos.

Se enfrentan mañana en Mestalla dos conceptos distintos de armar un club de fútbol. Valencia CF y Sevilla Fútbol Club, son dos ejemplos divergentes de cómo manejar en el fútbol moderno una sociedad deportiva. Uno, el del Valencia, vive permanentemente en la zozobra. Otro el del Sevilla Fútbol Club, sabe a donde quiere ir y como conseguirlo.

Dice la Real Academia de la Lengua, que “mercenario” es aquel que percibe un salario por su trabajo o una paga por sus servicios. Ya han cobrado los jugadores del Valencia.

Dice una estrofa del pregón de D. Antonio García Barbeito, que es para los sevillistas, algo así como la Academia Sevillista de la lengua:
Más que mi corazón, a mi me late tu escudo.

En esa batalla del domingo en Valencia entre el dinero y el sentimiento, nosotros ya hemos ganado por goleada.

domingo, 12 de abril de 2009

La Torrija


Jiménez ya lo había avisado en la previa. Como en los viejos y malos tiempos, cuando los tambores del resucitado todavía resonaban por Santa Marina, el Sevilla Fútbol Club dio, como antaño, la espantá.

El partido desde que empezó, tenía toda la pinta de esos encuentros atravesados en los que los futbolistas, no sé si por exceso de incienso, o por falta de entrenamientos, no se metían nunca en la pelea.

Cierto que faltó suerte en esos tres tiros al palo y que hubo un gol anulado en una posición muy dudosa de Luis Fabiano, pero también es cierto que el equipo le cogió asco al partido. Faltó intensidad y sobre todo velocidad en el juego para desarbolar a un equipo, que solo vino en busca de un punto y se llevó el botín completo.

Cierto que el Getafe no mereció llevarse los tres puntos, pero no hay que olvidar que a estas alturas de la competición todos los equipos se juegan los cuartos y no regalan nada.

Afortunadamente el equipo tiene margen de maniobra suficiente como para que el tropiezo de esta tarde no tenga demasiada trascendencia en la clasificación. Aunque prácticamente se esfuma la posiblidad de quedar subcampeón de liga.

Ahora nos espera esa etapa dura de montaña donde consecutivamente nos enfrentaremos al Valencia en Mestalla, al Barcelona en el Nou Camp y al Real Madrid en la Bombonera de Nervión.

Ha llegado la hora de la verdad y seis equipos luchan por dos plazas en Champions. Estamos mejor colocados que todos los demás y sería imperdonable desaprovechar la ventaja que tenemos. No debe haber mas sorpresas, entre otras cosas, porque el tiempo de las torrijas ya ha terminado.

viernes, 10 de abril de 2009

Sevillista y Macareno



Pasó la madrugá en Sevilla y tras ella la mañana de Viernes Santo. Como cada vez que la Señora de San Gil sale a la calle, las últimas veinticuatro horas han estado llenas de sensaciones y recuerdos imborrables para todos los que nos sentimos macarenos.


A la sombra de un fértil naranjo plantado en algún lugar de la calle Feria, mi padre, sevillista y macareno como yo, como sus tres hijos, la ve pasar cada año y cuando ese altar florido a modo de paso de palio llega a donde él reposa, una estrella blanca y rutilante se asoma al cielo de Sevilla.


Es la misma estrella que se dejó ver en el cielo de Eindhoven cuando Javi Navarro levantó al cielo la primera copa de la UEFA, la misma que presumió, mostrando su blanca brillantez en Mónaco, la misma que resurgió entre las nubes de Glasgow, la misma que bailó de gozo en el firmamento de Chamartin. Es la misma estrella que siempre está conmigo.

Mi padre fue sevillista y macareno y cuando el azahar avisa de que la Señora de San Gil está en la calle, mis hermanos y yo vamos a su encuentro con regocijo.

Hoy por la mañana, la casualidad ha querido que mi amigo Luismi y yo, creadores de este blog junto con otros amigos, hayamos coincidido viendo la Macarena en la calle Feria. Justo en ese momento donde los entendidos dicen que la Macarena, aunque cansada, está más guapa. Y ambos hemos compartido durante algunas horas ese sentimiento sevillista y macareno que nos legó nuestros padres.

Con mis disculpas a los macarenos que no sean sevillistas, y a los sevillistas que no sean macarenos.

domingo, 5 de abril de 2009

¡Son las estructuras, estúpido!


El crecimiento deportivo del Sevilla Fútbol Club en el último lustro, coincidiendo con el mandato presidencial de Jose María del Nido, es tan espectacular, que ni el más acérrimo enemigo de nuestro club puede negar la evidencia.

El Consejo de Administración del Club se ha cargado de un plumazo cualquier debate localista que sólo hacía evitar miras más altas. La Sevilla futbolística no admite comparación, ni permite sostener un debate al que muchos se empeñan en aferrarse.


No hay color en la Sevilla futbolística. Ni en lo deportivo, ni en lo institucional. Y la presentación ayer, del nuevo organigrama funcional del equipo más grande del Sur de Europa sólo viene a confirmar esa realidad.


En él están puestas las bases para un crecimiento institucional, económico y deportivo sólido. Porque un club grande no es aquél que de vez en cuando logra alcanzar un éxito deportivo. Un club grande es aquél que trabaja, de arriba abajo con unas estructuras modernas sólidas, con capacidad de organización, con sentido de la responsabilidad compartida, con gestores serios y eficaces.


Y si en lo deportivo no hay color en Sevilla, ni antes ni ahora, en lo institucional estamos a años luz de cualquier rival en el Sur de Europa. En el organigrama aprobado se recoge la estructura actual de la Sociedad Anónima Deportiva, Sevilla Fútbol Club, tanto a nivel de órganos societarios como de puestos ejecutivos y se esbozan algunos puestos y funciones de futura creación para acomodar la estructura de personal al crecimiento previsto por la entidad en los próximos años.


El Sevilla Fútbol Club SAD contará, en su nuevo organigrama, con dos subdirecciones generales, una deportiva y otra de márketing, comunicación e instalaciones, que serán ocupadas por el actual director deportivo, Ramón Rodríguez Verdejo, nuestro querido Monchi, y el actual director de marketing, Manuel Vizcaíno, respectivamente.

El nuevo organigrama contempla también la futura creación del Gabinete de Presidencia, como departamento multidisciplinar encargado de dar cobertura de secretaría, protocolo y prensa al Presidente de la Entidad, así como la figura del coordinador de medios de comunicación propios y la figura del controller o supervisor de control presupuestario de todas las áreas del Club, de momento vacantes.


También se incluye dentro del organigrama del Club la actividad realizada por la Fundación del Centenario del Sevilla Fútbol Club que, aunque dotada de personalidad jurídica propia y separada de la SAD, a efectos funcionales jerárquicos se inserta en la SAD y que continuará desarrollando sus habituales actividades sociales y formativas, pero asumirá además el futbol femenino y la Escuela de Fútbol "Antonio Puerta" , así como el Programa de voluntariado.

Si alguien quiere saber como funciona un club moderno, como se planifica el futuro en un club moderno, como se organiza un club moderno, como se reparten funcionalidades en club moderno, como se gestiona un club moderno, como se distribuyen las responsabilidades en club moderno, les aconsejo que se descarguen este valioso documento.

Miren, copien si pueden y aprendan, porque si no se han enterado, la respuesta al éxito del Sevilla Fútbol Club, admirado en todo el mundo es: ¡Son las estructuras, estúpido!


http://www.sevillafc.es/_www/pdf/organizacion-funcional.pdf

sábado, 4 de abril de 2009

Rumbo a la Champions


La victoria en Huelva y la derrota del Villareal en Almería, deja al equipo más grande del Sur de Europa en solitario y consolidado en la tercera posición del campeonato de liga y con el cuchillo entre los dientes buscando la segunda plaza que, por ahora, sólo por ahora, está en posesión del Real Madrid.

La victoria del Sevilla Fútbol Club en el Nuevo Colombino, es de las que sirve para que el grupo aumente su autoestima. No ha sido fácil traerse los tres puntos de Huelva. El Recre se jugaba la categoría y ha apretado con todas sus fuerzas para intentar ganar el partido.

Incluso tuvo un par de ocasiones muy claras para adelantarse en el marcador, pero el Sevilla Fútbol Club ha demostrado que lejos de Nervión es, sin duda alguna, el mejor equipo del campeonato.

Con oficio, con los cinco sentidos puestos en el choque, con Navas pegando dentelladas por esa banda derecha una y otra vez, con Romaric, Duscher y Renato, dueños del centro del campo y con Perotti fajándose en cada balón que llegaba por su zona de influencia, el equipo ha dado sensación de eso, de equipo.

Había que ganar y se ganó. Los apuros del último cuarto de hora, el pasito atrás que dio el equipo con la salida de un desafortunado –otra vez más –Fazio, y la falta de ritmo de Koné, junto con el cansancio de Kanouté, le dieron algunas opciones al Recreativo de Huelva en el último tramo del partido.


Resumiendo: la Champions pasará el año próximo otra vez por Nervión, y sólo la espectacular temporada del FC Barcelona, va a impedir al Sevilla Fútbol Club, pelear este año por la Liga. De hecho, a estas alturas del campeonato con 29 jornadas disputadas, tenemos 57 puntos, dos más que en aquella histórica temporada de 2006-2007, donde la liga nos la mangó un árbitro en Mallorca.
Mañana es domingo de Ramos, y sale la Borriquita. Y también La Amargura.

miércoles, 1 de abril de 2009

Monchi en SFC Televisión

Ramón Rodríguez Verdejo "Monchi", nuestro director deportivo, ha contestado bastantes preguntas en la intervención que ha tenido en el espacio el Debate del Sevillismo que se emite todos los lunes por la noche en el programa La Bombonera de Sevilla Fútbol Club Televisión.

De las muchas preguntas que se le han hecho, una de ellas ha sido respecto a que normalmente, es más difícil encontrar en nuestro mercado jugadores que marquen la diferencia arriba, en ataque, en punta, porque esos jugadores, suelen costar mucho dinero, puesto que son jugadores que deciden partidos con sus acciones, pero que jugadores que juegan como lateral, central, posiciones más de equipo, y aunque su trabajo destaque, no son tan decisivos, aunque sí importantes, quizás sí pudieran ser encontrados en el mercado nacional o en la cantera.

Monchi ha contestado con varios matices diciendo que se trabaja en base a unos parámetros definidos en los cuales se ciñe nuestra entidad, y uno de dichos matices, es que nosotros fichamos lo mejor de equipos medios, e incluso podemos llegar a fichar, en algunos casos, jugadores medios de equipos grandes, pero que el rol que ha asumido la entidad de ir mejorando la plantilla temporada tras temporada, hace más difícil toda esta cuestión.

Lo ha explicado con varios ejemplos, el caso de Fernando Navarro, es el mejor de un equipo medio, (Mallorca) Konko, (el mejor del Génova), Romaric, (el mejor del Le Mans), Duscher, (el mejor del Racing), etc. Sin embargo, a partir de ahí, cuando se confecciona una buena plantilla, una gran plantilla como la que tenemos en la actualidad, cada año costará mucho más trabajo mejorarla, con un matiz muy importante, el más importante de todos, nosotros no disponemos a día de hoy de los 18 o 20 millones de euros que en el mercado cuestan ese tipo de jugadores de mayor proyección y/o calidad que mejoran nuestra plantilla, jugadores que ya de por sí, también son deseados por un abanico de equipos que sí podrían pagarlos, con lo cual, esos jugadores siempre elegirán el club que mejor les pague.

Por otro lado, a la pregunta sobre la conveniencia o no de vender nuestros mejores jugadores a clubes de nuestro país, con el perjuicio que ello conlleva en las competiciones, Monchi ha explicado que cuando un club paga por un jugador lo que nuestra entidad pide, no se mira el club al cuál se marcha, es más, si el precio es alto, evidentemente en España sólo hay dos clubes que pueden pagar dichos precios.

Sobre el Sevilla Atlético, Monchi ha matizado que si hace falta asumir errores, él asume con total naturalidad sus errores de planificación de este año, pero difiere del error en sí, es decir, las salidas de jugadores a otros equipos. Ha explicado que el hecho de realizar todas esas salidas, es una ley del fútbol en sí misma, por cuestiones de mercado y proyección para el futbolista, es muy difícil retenerlos y deben de salir en ese momento, y quizás sí haya sido un error, el confiar el Sevilla Atlético a jugadores demasiado jóvenes.

También ha indicado que en el Foro, percibe la disyuntiva que existe con Manolo Jiménez, y piensa que con nuestro entrenador, a veces se ha sido muy injusto, y que en determinadas ocasiones, el público no es siempre soberano, puesto que si 28.000 dicen A y 14.000 dicen B, quizás no lleven la razón los que son mayoría.

Un tema bastante delicado a tratar, porque a menudo, los serviles que se sitúan junto a determinados intereses externos al Sevilla, serviles que suelen no saber diferenciar entre crítica y mejora y diluyen su opinión divagando entre mejora e intereses egoístas, o intereses de medios ajenos al club, manejan este tipo de declaraciones hacia su discurso particular, argumentando que estas declaraciones, forman parte de un adoctrinamiento por parte de la entidad respecto a dominar la voluntad de los sevillistas.

Esto es algo que para De Granito resulta del todo inaceptable desde el punto de vista del crecimiento institucional, puesto que se ha podido comprobar en más de una ocasión, que por criticar, se ha criticado a la radio, a la televisión, al periódico, al marketing, a los jugadores, activos que de por sí, han hecho crecer la entidad hasta llegar a lo que hoy somos por méritos propios, por lo que no se debiera confundir crítica con mejora, ni tener siempre en mente que criticar es mejorar sí o sí, porque a veces, algunas mentes camuflan la crítica destructiva vistiéndola de mejora.

En definitiva, muchos temas tratados, y otra acertadísima intervención de Monchi, que ha vuelto a nuestros medios de comunicación, pero esta vez no en una rueda de prensa ante muchos de esos que se llenan la boca de defendernos y de querer lo mejor para nuestro equipo, sino aclarando conceptos y temas para los nuestros, los de colorao.

Puede que luego vengan otros, y manipulen lo que Monchi ha dicho, o lo tapen, o no quieran saber nada de todo lo que ha contado, sencillamente para poder seguir con el discursito que se traen desde hace tiempo de dar caña al Tridente Sevillista, discurso que a veces, viene propiciado por entes internos en la ciudad, y a veces, viene dictado por entes externos a la ciudad, y un ejemplo claro de discursos dictados por ente externos a la ciudad es Radio Sevilla de la Cadena SER.

Monchi ha vuelto, o mejor dicho, no ha vuelto, es que nunca se fué.