Luis Fabiano clasifica a Brasil para el Mundial de Sudáfrica

Luis Fabiano se merienda a Mesi, y al Kun Agüero, y a Robinho, y a Cristiano Ronaldo, que salvo milagro, se quedará en el Paseo de la Castellana cuando los grandes del futbol estén disputando el Mundial de Sudáfrica, y todo eso a pesar de la manipulación descarada de casi todos los informativos deportivos, por encima incluso de la apisonadora mediática que tienen activada la trinchera merengue y culé.

Era el partido de los galácticos de uno y otro equipo, era el duelo Madrid-Barça al otro lado del Atlántico, pero cuando el árbitro pito el final de los noventa minutos, el bueno, como tantas otras veces, el goleador, como casi siempre con la selección pentacampeona del mundo, la estrella, como ocurre muy a menudo cuando juega Brasil, fue Luis Fabiano, el delantero centro de la canarinha, el mismo futbolista que se le niega el pan y la sal desde los cuatro puntos cardinales del planeta fútbol.

Y mire usted que casualidad, “O Fabuloso” juega, sigue jugando a pesar de la falta de respeto del AC Milan, que quiso pagar por él lo mismo que por un tuercebotas, a pesar del intento merengue de llevárselo hace dos años casi gratis cuando José María Del Nido lo blindó a prueba de saqueo en una de las grande operaciones del verano de 2007, es nuestro número nueve, viste de blanco y rojo y juega en el Sevilla Fútbol Club, el equipo más grande del Sur de Europa.

De Granito siempre se declaró un incondicional seguidor de Luis Fabiano. En éste y en otros medios de comunicación, incluidos los medios oficiales del club. Porque hay que ser muy miope, futbolísticamente hablando, para no ver, lo que muchos sevilllistas no querían ver: Que el nueve de la selecciona brasilera lleva la gloriosa casaca blanca del Sevilla Fútbol Club.

Y ahora que nadie en el mundo lo cuestiona, ahora que los telediarios abren sus secciones deportivas con el golazo de Luis Fabiano a la selección argentina, ahora que el futbol ha visto a “O Fabuloso” pintarle la cara al equipo de Diego Armando Maradona, esperamos y deseamos que nunca mas, repetimos, nunca más, el delantero centro de la canarinha chupe banquillo en Nervión estando en condicones de ser alineado. Es un lujo que no podemos permitírnoslo. Ni el equipo, ni la Dirección deportiva, ni la afición, ¿Verdad Manolo?

¿Y la selección española?
Ah sí, a pesar del inepto de Fernando Hierro y sus recomendados, ganó a Bélgica. Pero de la selección española hablaremos otro día, justo el mismo día que por equivocación algún jugador del tercer clasificado de la liga española tenga algún futbolista seleccionado.