Mi padre, socio nº 280 cuando se fue al tercer anillo de Nervión, idolatraba a D. Ramón Sánchez Pizjuán, el mejor Presidente del Sevilla Fútbol Club cuando el fútbol en España se jugaba en blanco y negro.
Hoy sus hijos disfrutan del mejor Sevilla de toda la historia. Y en eso tiene mucha culpa el hombre que hoy cumple ocho años al frente de la centenaria nave sevillista: José María del Nido Benavente. Para no desmerecer a D. Ramón y también para honrar su memoria, solo diré que el mejor Presidente del Sevilla Fútbol Club que yo he conocido en mis casi cuarenta años de socio del club más grande del Sur de Europa.
Muchos son los logros conseguidos, productos todos ellos, de una eficaz gestión en el ámbito económico, deportivo e institucional y muchos los halagos de quienes ven en su gestión un modelo a imitar en otros ámbitos y en otras entidades.
En el aspecto deportivo el resultado es demoledor, cumpliéndose así lo que en su día dijo nuestro primer presidente, José Luis Gallegos: “...nuestro premio será la admiración de los demás”. A los seis títulos conseguidos por el primer equipo en siete de las finales disputadas, 3 entorchados europeos y tres nacionales, hay que sumar las dos Copas de España de Juveniles consecutivas, el ascenso del Sevilla Atlético a Segunda División, la creación del equipo femenino, la profunda remodelación de la Ciudad Deportiva, la creación de la Escuela de Fútbol Antonio Puerta, y la futura remodelación del estadio Ramón Sánchez Pizjuán, un reto que la crisis económica ha aplazado pero que conociendo la ambición del Presidente, tarde o temprano se llevará a acabo.
En el aspecto económico los logros no son menores. Se ha pasado a tener telarañas en la caja fuerte, a ser un club de reconocida solvencia y a liderar, junto el todopoderoso Real Madrid, el ranking de clubes más saneado de España. El Sevilla Fútbol Club bajo estos ocho años de mandato de José María del Nido ha pasado de ser un club técnicamente en quiebra, a poseer alrededor de 50 Mll de euros de fondos propios.
Institucionalmente hablando el mandato de José María del Nido está resultando ser el de mayor estabilidad de los últimos cincuenta años del club. El accionariado mayoritario encuadrado en el grupo “Sevillistas de Nervión” ha depositado en José María del Nido toda su confianza y la respuesta del Presidente ha sido dotar a la entidad del sosiego necesario para llevar a buen puerto una extraordinaria gestión basada en el rigor en las decisiones, el consenso como elemento integrador, la planificación como instrumento de trabajo y una permanente vigilancia del riesgo en cada una de las transacciones económicas del club, que se sostienen bien gracias a esa irrenunciable política de vender bien para comprar mejor.
Pero lo más importante de todo, al menos para mí, de estos ocho años de presidencia sevillista de José María del Nido, es que bajo su presidencia el sevillismo ha vuelto a sentirse orgulloso de su historia. De su pasado, de su presente y también de su futuro. Con José María del Nido, los sevillistas hemos recuperado nuestra autoestima, perdida por calamitosos episodios de algunos dirigentes de cuyo nombre no quiero acordarme. Con José María del Nido, los sevillistas hemos enterrado bajo siete títulos conquistados con orgullo y honor, décadas enteras de frustraciones, de desencantos y de desesperanza. Con José María del Nido, los sevillistas hemos recuperado la sonrisa en nuestros labios, las lágrimas de alegría en nuestras mejillas, la ilusión pérdida y la felicidad de ser sevillista, el mejor título que alumbra nuestros corazones blanquirojos.
Feliz aniversario Presidente
Hoy sus hijos disfrutan del mejor Sevilla de toda la historia. Y en eso tiene mucha culpa el hombre que hoy cumple ocho años al frente de la centenaria nave sevillista: José María del Nido Benavente. Para no desmerecer a D. Ramón y también para honrar su memoria, solo diré que el mejor Presidente del Sevilla Fútbol Club que yo he conocido en mis casi cuarenta años de socio del club más grande del Sur de Europa.
Muchos son los logros conseguidos, productos todos ellos, de una eficaz gestión en el ámbito económico, deportivo e institucional y muchos los halagos de quienes ven en su gestión un modelo a imitar en otros ámbitos y en otras entidades.
En el aspecto deportivo el resultado es demoledor, cumpliéndose así lo que en su día dijo nuestro primer presidente, José Luis Gallegos: “...nuestro premio será la admiración de los demás”. A los seis títulos conseguidos por el primer equipo en siete de las finales disputadas, 3 entorchados europeos y tres nacionales, hay que sumar las dos Copas de España de Juveniles consecutivas, el ascenso del Sevilla Atlético a Segunda División, la creación del equipo femenino, la profunda remodelación de la Ciudad Deportiva, la creación de la Escuela de Fútbol Antonio Puerta, y la futura remodelación del estadio Ramón Sánchez Pizjuán, un reto que la crisis económica ha aplazado pero que conociendo la ambición del Presidente, tarde o temprano se llevará a acabo.
En el aspecto económico los logros no son menores. Se ha pasado a tener telarañas en la caja fuerte, a ser un club de reconocida solvencia y a liderar, junto el todopoderoso Real Madrid, el ranking de clubes más saneado de España. El Sevilla Fútbol Club bajo estos ocho años de mandato de José María del Nido ha pasado de ser un club técnicamente en quiebra, a poseer alrededor de 50 Mll de euros de fondos propios.
Institucionalmente hablando el mandato de José María del Nido está resultando ser el de mayor estabilidad de los últimos cincuenta años del club. El accionariado mayoritario encuadrado en el grupo “Sevillistas de Nervión” ha depositado en José María del Nido toda su confianza y la respuesta del Presidente ha sido dotar a la entidad del sosiego necesario para llevar a buen puerto una extraordinaria gestión basada en el rigor en las decisiones, el consenso como elemento integrador, la planificación como instrumento de trabajo y una permanente vigilancia del riesgo en cada una de las transacciones económicas del club, que se sostienen bien gracias a esa irrenunciable política de vender bien para comprar mejor.
Pero lo más importante de todo, al menos para mí, de estos ocho años de presidencia sevillista de José María del Nido, es que bajo su presidencia el sevillismo ha vuelto a sentirse orgulloso de su historia. De su pasado, de su presente y también de su futuro. Con José María del Nido, los sevillistas hemos recuperado nuestra autoestima, perdida por calamitosos episodios de algunos dirigentes de cuyo nombre no quiero acordarme. Con José María del Nido, los sevillistas hemos enterrado bajo siete títulos conquistados con orgullo y honor, décadas enteras de frustraciones, de desencantos y de desesperanza. Con José María del Nido, los sevillistas hemos recuperado la sonrisa en nuestros labios, las lágrimas de alegría en nuestras mejillas, la ilusión pérdida y la felicidad de ser sevillista, el mejor título que alumbra nuestros corazones blanquirojos.
Feliz aniversario Presidente
Se te han olvidado los Dos Baloncitos de Oro consecutivos que nos proclamaron como Mejor Equipo del Mundo.
ResponderEliminarTodos sabíamos que nuestro Equipo era siempre el Mejor Equipo del Mundo, pero ahora lo es con papeles.
¡¡¡ VIVA EL SEVILLA ¡¡¡
Michelangelo