POST DEL SEGUNDO TIEMPO:
Podría haber copiado y pegado lo comentado en el post anterior para referirme al bochornoso e indignante espectáculo ofrecido hoy por nuestro equipo del alma, y al que toda España y medio mundo (el partido se ha televisado para toda Europa y Sudamérica) ha podido contemplar esta terrible tarde-noche en el Nou Camp.
Yo estaba convencido de que el rédito del partido de ida era más que suficiente para levantar un nuevo título. Y ese convencimiento era aun a sabiendas de que el Barcelona iba a salir con todo lo que tiene. Pero no entraba en mis cálculos que mi equipo saliera derrotado de antemano ofreciendo la Supercopa de España (un título de los que no estamos sobrados) en bandeja de plata al equipo azulgrana.
Jamás pensé que la indolencia y el pasotismo iban a ser esta noche en el Nou Campo, compañeros de viaje.
Jamás pensé que la actitud del equipo, (lamentable el trote cochinero de algunos futbolistas) iba a ser la que he visto esta noche en la Ciudad Condal.
Jamás pensé que vería a mi equipo entregar la cuchara, bajar los brazos y agachar la cabeza, como lo he visto esta noche. Para ofrecer este vergonsozo espectáculo, para hacer el ridículo más espantoso, para tirar la camiseta y el escudo de esta manera, más vale que hubieran salido los juveniles.
Dudo mucho que Rodri, o José Carlos, o Cala, o Luna, hubiesen sido peores que Negredo, Romaric, Konko o Fernando Navarro.
Antonio Álvarez sale muy tocado de esta burla de partido, y además está empezando a coger fama de bocasas. Porque eso es lo que es, quien dice una cosa, y hace la contraria. Y me duele decir esto, como me duele afirmar que Alfaro no tiene nivel para las exigencias deportivas del Sevilla, pero no sería sincero si me lo callara. Hoy era su oportunidad y ha fracasado rotundamente.
Alvarez ha vuelto a quedar en evidencia dejando la pólvora fuera del césped, y desmintiendo sus propias palabras cuando declaraba en la previa del partido, que pondría un equipo competitivo para traerse la Copa. O es un bocasas, o sus futbolistas no le hicieron caso. No se que es peor.
El equipo no ha querido plantarle cara al Barcelona. Supongo, pero no es excusa, que pensando en el partido del próximo martes contra el Sporting de Braga. Pero no ayuda este bochornoso baño, a pensar que la remontada de la Champions es posible; ni ayuda a llenar el estadio, ni a creer en este proyecto que por momentos se le escapa de las manos a Antonio Álvarez.
Hoy hemos demostrado que somos muy vulnerables cuando se les regala la camiseta de titular a futbolistas que no dan la talla. Y ha quedado manifiestamente claro, que hay que soltar mucho lastre en esta plantilla donde algunos están esperando casi un milagro para encontrar equipo, y otros siguen llevando en el pecho un escudo por el que no sienten absolutamente nada. Su nivel de compromiso con el equipo es cero.
En definitiva, noche negrísima para el sevillismo y de infausto recuerdo para la historia del club más grande del Sur de Europa. Si doloroso es perder una final, hacerlo de este modo es horrible. Futbolistas y técnicos, han mancillado el honor del club, han manchado el escudo, y han insultado al sevillismo. Y el martes ya veremos que pasa....
Yo estaba convencido de que el rédito del partido de ida era más que suficiente para levantar un nuevo título. Y ese convencimiento era aun a sabiendas de que el Barcelona iba a salir con todo lo que tiene. Pero no entraba en mis cálculos que mi equipo saliera derrotado de antemano ofreciendo la Supercopa de España (un título de los que no estamos sobrados) en bandeja de plata al equipo azulgrana.
Jamás pensé que la indolencia y el pasotismo iban a ser esta noche en el Nou Campo, compañeros de viaje.
Jamás pensé que la actitud del equipo, (lamentable el trote cochinero de algunos futbolistas) iba a ser la que he visto esta noche en la Ciudad Condal.
Jamás pensé que vería a mi equipo entregar la cuchara, bajar los brazos y agachar la cabeza, como lo he visto esta noche. Para ofrecer este vergonsozo espectáculo, para hacer el ridículo más espantoso, para tirar la camiseta y el escudo de esta manera, más vale que hubieran salido los juveniles.
Dudo mucho que Rodri, o José Carlos, o Cala, o Luna, hubiesen sido peores que Negredo, Romaric, Konko o Fernando Navarro.
Antonio Álvarez sale muy tocado de esta burla de partido, y además está empezando a coger fama de bocasas. Porque eso es lo que es, quien dice una cosa, y hace la contraria. Y me duele decir esto, como me duele afirmar que Alfaro no tiene nivel para las exigencias deportivas del Sevilla, pero no sería sincero si me lo callara. Hoy era su oportunidad y ha fracasado rotundamente.
Alvarez ha vuelto a quedar en evidencia dejando la pólvora fuera del césped, y desmintiendo sus propias palabras cuando declaraba en la previa del partido, que pondría un equipo competitivo para traerse la Copa. O es un bocasas, o sus futbolistas no le hicieron caso. No se que es peor.
El equipo no ha querido plantarle cara al Barcelona. Supongo, pero no es excusa, que pensando en el partido del próximo martes contra el Sporting de Braga. Pero no ayuda este bochornoso baño, a pensar que la remontada de la Champions es posible; ni ayuda a llenar el estadio, ni a creer en este proyecto que por momentos se le escapa de las manos a Antonio Álvarez.
Hoy hemos demostrado que somos muy vulnerables cuando se les regala la camiseta de titular a futbolistas que no dan la talla. Y ha quedado manifiestamente claro, que hay que soltar mucho lastre en esta plantilla donde algunos están esperando casi un milagro para encontrar equipo, y otros siguen llevando en el pecho un escudo por el que no sienten absolutamente nada. Su nivel de compromiso con el equipo es cero.
En definitiva, noche negrísima para el sevillismo y de infausto recuerdo para la historia del club más grande del Sur de Europa. Si doloroso es perder una final, hacerlo de este modo es horrible. Futbolistas y técnicos, han mancillado el honor del club, han manchado el escudo, y han insultado al sevillismo. Y el martes ya veremos que pasa....
de acuerdo contigo en todo,ahora a levantar la cabeza,al menos eso es lo que nos toca siempre a la afición,que somos los que de verdad sentimos este espantoso ridiculo,un abrazo hermanos de granito y ahora mas que nunca sevilla fútbol club.
ResponderEliminarSuscribo el post del principio al final. Y creo que Del Nido también, diferente, que en su papel de Presidente dirá que el martes es fundamental, que la afición debe llevar al equipo en volanda y frases de este tipo. Entiendo que el Sevilla no se gaste una millonada en jugadores, y que haga un esfuerzo por renovar a los buenos que tiene, pero sí, que no se hagan experimentos en el banquillo.
ResponderEliminarSe apostó por Jiménez y ahora por Álvarez.
Nada se puede afirmar, pero con un entrenador tipo Manzano, difícilmente nuestro equipo hubiese perdido contra un magnífico equipo, pero con 8 días de entrenamientos.
Saludos.