viernes, 13 de agosto de 2010

Luis Fabiano

Decía en un post reciente, que el mejor de los fichajes esta temporada sería mantener en la plantilla a los cuatro futbolistas que sonaban en los medios de comunicación como posible transferibles: Adriano (que se quería ir y al final se marchó); Navas, Kanouté y Luis Fabiano. Una vez que el Presidente del Sevilla Fútbol Club ha admitido públicamente la oferta del Olimpique de Marsella (ya no es rumor periodístico, ni una filtración interesada de parte, sino un hecho constatado por el máximo mandatario del club), me siento en la necesidad de opinar en este controvertido, cansino ya, y repetitivo debate sobre la continuidad o no de Luis Fabiano en el Sevilla.

Para analizar la posible salida de Luis Fabiano del club, hay que, en mi opinión, contextualizar el entorno en el que se produciría; es decir, en medio de una crisis económica que ha llegado al mundo del fútbol, (un informe reciente de un medio de comunicación nacional hablaba de un descenso en los fichajes de un 125 por ciento menos que el año pasado) a pocos días de que el equipo más grande del Sur de Europa, defienda el pabellón sevillano y andaluz en la élite futbolística europea y la situación contractual del futbolista con el club, cuestión ésta, en absoluto baladí en el proceso negociador.

A ello se le suma el interés de su representante, loco por cobrar su comisión, y el interés del futbolista, que sabe que está ante el que probablemente sea el último contrato profesional de su carrera deportiva. En estas circunstancias, es lógico pues que el club se sienta entre la espada de desmantelar el equipo con una sensible, muy sensible en mi opinión, baja deportiva, y la pared de saber que a Luis Fabiano le queda exactamente cuatro meses – el uno de enero de 2011, quedaría libre para negociar su contrato con quien quisiese - para irse gratis sin dejar un euro en caja. El carácter y la frágil personalidad de Luis Fabiano, que lleva mucho tiempo deshojando la margarita, unos días anunciando, su marcha, y otros anunciando la intención de renovar, tampoco facilita las cosas.

Por todo ello el club solo tiene dos salidas: vender al futbolista cuanto antes y a un precio que consuele la pérdida deportiva de uno de los futbolistas más importantes de cuantos han pasado por el Sevilla Fútbol Club en toda su historia o intentar la renovación, algo que parece difícil, si son ciertos los números que le ofrece por temporada el club francés.

La crisis económica no sólo ha provocado que el mercado de fichajes esté prácticamente parado, sino que todas las fuentes de ingresos: publicidad, merchandising e ingresos extraordinarios han sido y lo serán aún más, drásticamente reducidas; los patrocinadores están huyendo del mundo del fútbol y sigue en el aire –en standby, pero en el aire- el asunto de los ingresos televisivos, algo que tiene nerviosos a los clubes de fútbol. Por ello es necesario que ningún futbolista puede gravar la economía del club. El Sevilla no tiene dinero, ni tampoco esa es la política del club, para fichar a un futbolista contrastado de alto nivel de esos que solo por el nombre te garantiza 20 goles. Como tampoco los tiene para despilfarrar ocho millones de euros por un futbolista de 32 años. Ni tampoco se puede permitir el lujo de dilapidar la oportunidad de hacer caja con el delantero centro de Brasil, cuando éste no tiene claro el quedarse, tiene 30 años, y sólo un año más de contrato.

La clave en el traspaso de Luis Fabiano, si se produce finalmente, ojalá que no, es acertar en su sustituto. Y como en el caso de Daniel Alves, no es fácil encontrar recambio a Luis Fabiano, que se marcharía después de un lustro histórico en el que ha marcado 71 goles en 139 partidos con una media que supera 0'5 goles por partido y artífice fundamental en la conquista de los siete títulos que lucen en nuestra vitrina. Dudo mucho incluso, que el Sevilla tenga otra vez la oportunidad de contar entre sus filas con el nueve de la selección pentacampeona del mundo. Pero ahí está Monchi, que salvo errores graves –pero puntuales – sigue teniendo, al menos para mi, todo el crédito del mundo.

Ante la crisis hay que ser imaginativo (fichaje gratis de Dabo); prudentes (cesión con opción de compra de Cigarini) y tener suerte en la inversión (Tiberio Guarante) y además manejarse con responsabilidad en las salidas. Casi 5 millones de euros lleva ahorrados el club en fichas que dejará de abonar tras las salidas de David Prieto, Casado, Crespo, Tom de Mul, Stankevicius, Armenteros, De la Bella y Adriano. Por esas salidas además el club ha ingresado alrededor de 15 M€, y todavía lo prioritario, deportiva y económicamente hablando, es buscar acomodo a Chevantón –una sangría para el club - y Duscher, otra de las fichas altas.

En esa tarea prioritaria estaba el club cuando surge el interés del Marsella por Luis Fabiano. Su salida, de producirse ahora, sería deportivamente muy inoportuna, pero inevitable si la oferta es suficientemente atractiva en lo económico. Ahí tiene la palabra Del Nido, alguién que sabe como manejar estas situaciones en beneficio del club
.

2 comentarios:

  1. Yo esto no lo veo demasiado claro a pesar de las palabras del Presidente. Ojalá al final renueve, pero me temo que no va a ser así. Me ha llamado la atención que cuando le han hablado a Del Nido de la debilitación de la plantilla, le ha dado la palabra a Monchi. Creo que este año no va a dejar pasar tantos fallos en los fichajes como en el año pasado.

    ResponderEliminar
  2. yo sigo confiando a tope en ellos,seguro que al final vuelven a acertar,todo se dislucirá en dias,un abrazo hermanos de granito,me alegro de leeros,nos vemos cracks.

    ResponderEliminar